10/10/1970. El Progreso.
"Acompañando al presidente de la Comisión Provincial de Monumentos, nuestro director, don José Trapero Pardo, y al director del Museo de Lugo y “eterno chaval” pese a sus ochenta y tantos años don Manuel Vázquez Seijas, hemos estado en los montes de Labrada. El viaje se debió a una insinuación del alcalde de Pastoriza, doctor Cabaneiro López, Se sumaron también el alcalde de Abadín, don Pedro Fernández Carreiras; el diputado provincial de Mondoñedo, señor Díaz Carreiras y el párroco de Montouto. El objeto del mismo fue ver unas penas, con diversas cuevillas y señales humanas, existentes en aquel gran penedo. Los técnicos nos dirán algún día algo sobre sus particularidades.
En la sobremesa hubo anécdotas: de lobos —que por los montes de Abadín, y con razón, siguen considerando animal dañino— y de las otras.
Les contaremos una totalmente veraz: Un paisano al oír al señor Fernández Carreiras, practicante de profesión, pedir con urgencia una botella de vino embotellado, dijo ingenuamente o con socarronería, “e logo, hay algún enfermo, don Pedro”.
